En los últimos años, la tecnología ha revolucionado la forma de vida del usuario. Hemos cambiado nuestra manera de relacionarnos y de comunicarnos, las plazas donde antes se conversaba se han sustituido por grupos de WhatsApp, los álbumes de fotos por galerías de Instagram, etc. La revolución digital ha llegado a cada rincón de nuestro día a día, desde la manera de organizar viajes o de comprar, hasta la manera de aprender o trabajar.
El usuario del siglo XXI lleva un ritmo frenético. Gracias a la red, las distancias son cada vez más cortas, herramientas como YouTube o Google se han convertidos en elementos fundamentales a la hora de resolver una duda o buscar solución a algo.
El paradigma de aprendizaje ha cambiado, y la forma de hacerlo también. El modelo analógico de “alumno – academia – profesor” ha quedado atrás, el usuario actual prefiere tener un contenido inmediato, sin tener que desplazarse, al mínimo coste y que le permita organizarse dentro de sus tiempos.
¿Dónde puedo aprender inglés hoy?
La globalización ha acentuado la necesidad de aprender idiomas, en especial el inglés, sin embargo y a falta de tiempo, la academia de inglés tradicional no parece ser una solución eficaz para millones de personas. Métodos como los cursos online o las apps han ido trasladando el consumo paulatinamente. A continuación, te contamos algunas de las ventajas que estos innovadores sistemas ofrecen:
- Organización del tiempo: El nuevo paradigma de aprendizaje, hace que el usuario reclame más independencia a la hora de elegir el cómo y cuándo de sus clases. Poder organizarse el día decidiendo los horarios, en torno a las obligaciones básicas, hace que una academia de inglés sea un problema. Las aplicaciones o recursos online evitan esto, tú eres el que manda a la hora de decidir cuándo y cuánto estudias. Las clases online te ayudan a organizarte
- Portabilidad: El dónde también es un punto a tener en cuenta. ¿Y si pudieras aprender, en cualquier parte? En tu casa, en el metro, estando de vacaciones, decidiendo tú el espacio. Con las nuevas tecnologías esto es posible, no tienes más que llevarte un dispositivo con internet para poder tener tu academia donde quieras.
- Coste: Todos sabemos la inversión que supone una academia o realizar un curso presencial en el extranjero. Si bien es cierto que son métodos eficaces, como veremos a continuación, el tiempo y el el desplazamiento que suponen les restan mucha rentabilidad a la hora de priorizar tareas. Esta diferencia de precio se debe costes fijos que una academia tiene (luz, empleados, limpieza, calefacción, local..). Es por tanto comprensible la diferencia de precio entre el formato presencial y digital. Los cursos online y las apps, hacen mucho más atractivo el aprendizaje cuando la inversión es siempre menor.
- Transporte – distancias: Con todas las obligaciones laborales y académicas con las que contamos hoy en día, priorizar a la hora de elegirlas, es primordial. Sobre todo en lo que respecta a las distancias y el tiempo que conlleva el desplazamiento. Los recursos online, como las aplicaciones, te permiten tener una academia de inglés, en la palma de tu mano. Poder hacerlo desde casa o en el transporte público, rentabilizando el tiempo del transporte y sin quitarte de otras responsabilidades prioritarias.
Como verás existe poca necesidad de acudir a una academia hoy en día, nosotros te ofrecemos una buena forma de aprender a buen precio, dónde, cómo y cuándo tú quieras. ¿Te hemos convencido? Prueba hoy nuestra app y aprende inglés.
